En la mayoría de los casos la causa de la obesidad es debido a una ingesta de calorías que excede el consumo de las mismas. Por lo tanto, en teoría, la solución incluye reducir la ingesta y aumentar el gasto energético.
El objetivo del seguimiento es la CORRECCIÓN DE LOS HABITOS ALIMENTICIOS. Esto significa orientar adecuadamente al paciente para lograr un control y equilibrio entre LA CALIDAD Y LA FRECUENCIA del alimento ingerido, LA CANTIDAD del alimento estará regulada una parte por el paciente y otra parte por el procedimiento, según este sea restrictivo o malabsortivo.
Es también importante crear en el paciente el hábito de realizar actividad física diaria, ya que con ésta mejora la condición cardio-pulmonar, se aumenta el gasto energético y se reafirman los tejidos del cuerpo.
Es necesario que el estudio, valoración, tratamiento y seguimiento del paciente se realice bajo el control de un equipo MULTIDISCIPLINARIO que incluya al cirujano, anestesiólogo, nutricionista, psicólogo, médico internista y fisiatra o terapista física para así lograr el correcto tratamiento de las diferentes comorbilidades que pueda presentar el paciente como consecuencia de su obesidad.